La Brújula Despistada

La Brújula Despistada
La Brújula Despistada.

jueves, 28 de febrero de 2013

Caperucita en Manhattan

Esto podría decirse que es otra nueva sección. Me he decidido a hablar de libros que leo (y, en general, que me gustan) y opinar sobre ellos. Así que empezaré con uno que me gusta mucho y que me he leído varias veces: Caperucita en Manhattan, de Carmen Martín Gaite.
Autora: Carmen Martín Gaite
Ilustradora:Carmen Martín Gaite
Editorial: Siruela
:Portada
El libro empieza contándonos cómo es Manhattan (desde el punto de vista de la escritora, claro) y explicándonos qué papel tiene lady Liberty, que es como se le conoce a la Estatua de la Libertad. Esta es la historia de Sara Allen, una niña de diez años que vive en Brooklyn. Todos los sábados, va con su madre y su chubasquero rojo en metro a Manhattan, para llevarle a su abuela una cesta con una tarta de fresa.
Sara admira a su abuela, una ex-cantante de music-hall, y tiene mucha imaginación, en parte gracias a su ella, que tuvo una relación con un librero que regaló a Sara sus primeros libros y unos cubos de letras. Así Sara aprendió a leer, imaginar, e inventar palabras. Su mayo sueño es ir sola a Manhattan a llevar la tarta a su abuela, aunque la niña esté un poco harta del pastel. Todas las noches, despliega su plano de Manhattan y lo recorre con su imaginación, fijándose en especial en una pequeña isla: la isla donde vive la Estatua de la Libertad.
Al mismo tiempo, por la ciudad pasea Miss Lunatic, una misteriosa anciana mendiga que va por las calles ofreciendo su ayuda (o un elixir contra el miedo) a todo el que lo necesite. Y al mismo tiempo, por Manhattan también vaga míster Woolf, un millonario dueño de una pastelería y un edificio con forma de tarta gigante, obsesionado con la tarta de fresa, ya que dicen que la suya no sabe muy bien, precisamente.
   Una vez colocados estos personajes en Manhattan, la isla con forma de jamón, y siguiendo cierto paralelismo con el cuento de Caperucita Roja, sólo hay que mezclar bien, echar una pizca de magia y abrir el libro. A mí me encantó. Sara, Miss Lunatic, todo Manhattan y de hecho todo el libro están rodeados de un halo de magia especial, una especie de magia "implícita" y real. Sara Allen es una niña que encandila desde el principio y con la que me sentí muy identificada, y Miss Lunatic es un personaje con esa magia especial que también me gustó mucho, muchísimo. Todos los personajes y lugares están muy bien escritos y descritos, y Carmen Martín Gaite consigue que, aunque no lo parezca, todo, todo encaje perfectamente, creando una historia fantástica, maravillosa y única.
Un detalle que me parece muy bonito es que, igual que en El Principito, el libro tiene ilustraciones de la propia autora, incluida la dedicatoria.
   Es un libro que recomiendo para quien quiera leer una buena historia, o una historia bonita, para quien quiera evadirse, para quien quiera despejar la mente o para quien quiera encontrar un elixir contra el miedo. Yo creo que os gustará. Miranfú.

viernes, 22 de febrero de 2013

Sirena Meixide

Hoy estreno la entrada que anuncié aquí: hoy os hablaré de un personaje legendario de España. Se trata de la sirena Meixide.
En Galicia hay varias rías, y una de ellas es la ría de Muros, donde hay unos bajos muy peligrosos: Meixide, Mean, Ximiela y Baia. Cerca de allí, vivía un pescador llamado Xan de Mean. Xan tenía una barca llamada La Pescadora que no estaba pescando tanto como su nombre decía. Juan decidió adentrarse en el mar para ver si pescaba más. El mar estaba tranquilo. La brisa dejó de soplar y se levantó la niebla. Mientras esperaba a que se disipara y volviese el viento, Xan empezó a cantar un vieja canción marinera, y el eco le contestaba. Pero entonces se dio cuenta de que no era el eco, sino una voz de mujer, que repetía su canción. Xan se dirigió remando hacia donde provenía la voz, y, sentada sobre una roca, encontró a la sirena Meixide.

Xan de Mean no volvió a la costa. La Pescadora fue encontrada varada en la playa. Sin embargo, pudieron suceder tres cosas. Elegid la que os parezca mejor:
Desde aquel día, aparecieron dos nuevas rocas cerca de la costa, donde antes no había ninguna. Nadie supo qué pasó, pero las llamaron Mean y Meixide. Hay quien dice también que la sirena y el pescador se convirtieron en rocas, y que esas rocas vuelven a convertirse en Mean y Meixide cuando el mar está en calma y se levanta la niebla. Pero hay quien prefiere pensar (y creo que yo lo prefiero también) que Xan de Mean se convirtió en sireno y que vive en la Costa de la Muerte junto a Meixide.
He conocido esta historia gracias a la Contadora de Soños.  



lunes, 11 de febrero de 2013

La Hora del Baño

Bueno, lo cierto es que esta especie de sección la tengo más que abandonada, casi olvidada, pero a pesar de todo, voy a intentar continuarla. Así que vamos a seguir con...
El NIÑO
-Otra vez a la bañera. ¡No me gusta nada! Con lo bien que estaría ahora jugando. Ya que he acabado los deberes... Además, ¡hoy no he tenido gimnasia en el cole! No es para tanto. Bueno, me daré una duchita rápida y así me iré a jugar en seguida. A ver. ¿Esto cómo se baja? ¡Jopé! ¡No llego!
-¡¡Mamááá!!
Vale, ahora está mejor. Ya puedo encender el agua. ¡Aaah, está fría! A ver así... ¡Noo, ahora está caliente! Menos, menos... Vale, ahora sí... Ya está. Ya va bien. Vale, me mojo rápido, y ahora el gel... ¡Huy, que se me cae! Bueno, bueno, no pasa nada... Ya me enjabono. ¡Huy, qué divertido! Vamos a hacer unas pompas. A ver si esta me sale más grande. ¡Ups! Voy a probar otra vez. Nada. Bueno, creo que ahora me tengo que poner el champú... ¡Anda, si está aquí mi barco! ¡Ya no me acordaba! Vaya, aún navega. ¡Vamos! ¡Soltad amarras! 
Uy, si me tengo que desenjabonar primero... Qué bien... Qué calentita está el agua ahora... Y ahora mi barco va a atravesar una cascada enoooorme...
-¿¡Qué estás haciendo!? ¿¡Te has volatilizado!? ¡Date prisa! ¡Llevas dos horas ahí dentro!
¿Dos horas? Caray, ¿¡tanto!? Bueno, vale, ya salgo... Ya me seco... Vaya, pues no se está tan mal aquí...